Las muertes sólo muestran una parte del problema de la violencia contra las mujeres cuyo caldo de cultivo se genera en la desigualdad de mujeres y hombres.
La violencia que en sus diferentes formas (psicológica, económica, física, sexual, vicaria…) se ejerce contra las mujeres, supone un serio atentado contra su dignidad e integridad física y moral; en consecuencia, una grave e intolerable violación de los derechos humanos.
Esta tragedia nos enfrenta a la responsabilidad que tenemos las instituciones y el conjunto de la sociedad en hacer efectiva la Igualdad en nuestro municipio. En este sentido, debemos seguir reforzando nuestras acciones de sensibilización y prevención.
El Ayuntamiento se suma a todas las muestras de repulsa que se organicen y anima a la ciudadanía a participar en ellas.